Unilever tuvo que dar marcha atrás. Fue luego de publicar -a través de su marca Dove– un spot que fue catalogado como «racista». La multi tuvo que recular con su campaña.
La anglo-holandesa Unilever saltó a la tapa esta semana luego de que un spot de su factoría generara una gran controversia.
Bajo el sello de su marca Dove, el corto -criticado por racista- reproduce la imagen de una mujer negra que al quitarse la remera se convierte en blanca.
Fue por ello que la compañía se vio obligada a hacer borrón y cuenta nueva. La multi se retractó a través del Twitter oficial de Dove, ya que la imagen «no representa la diversidad de la belleza real». Además Unilever explicó que eliminó la publicación y que a partir de ahora aprobará los contenidos antes de que sean publicados.
Esto llama la atención, ya que fue justamente Dove la que rompió con los estereotipos en 2004 cuando comenzó a lanzar campañas apuntando a la belleza real. Ver artículo