Desde el próximo 1 de julio, el portafolio de la suiza Sandoz comenzará a ser comercializado en la plaza local por el laboratorio Biosidus. Esto se debe a la decisión de la compañía europea, de buscar un nuevo modelo de negocio en el país. La determinación de Sandoz va en línea con la tomada por la norteamericana Eli Lilly que se apoyó en el grupo Raffo. Este modelo también fue adoptado por varias multis recientemente.
La complejidad del mercado argentino, su acotada escala y su esmerilada rentabilidad, son algunas de las razones que torcieron el brazo de la suiza Sandoz en el país. Se trata de la corporación enfocada en biosimilares y que está encarando un proceso de spin off desde la farmacéutica Novartis.
Según ya se barajaba en el mercado, la empresa estaba buscando desde hace varios meses, un socio estratégico local a quien encomendarle su cartera de productos. Y ahora Pharmabiz pudo confirmar, que la compañía elegida es el laboratorio Biosidus, con la que durante junio avanzará en un proceso de transición y la que desde el 1 de julio, se quedará a cargo del portafolio de Sandoz en el país.
Y en esta misión de buscar candidatos locales, uno de los datos que seguramente inclinó la balanza fue el de que Biosidus está encabezada por Mariano de Elizalde. Se trata de un ejecutivo que conoce de cabo a rabo el portafolio de Sandoz por haber ejercido en la compañía por 16 años. Fue gerente general para Cono Sur, luego para México y posteriormente para Brasil, hasta que lo convocaron desde Biosidus.
El otro driver es que Biosidus está enfocada en biosimilares, y ambos portafolios harán match. Asimismo, la compañía conoce el terreno del alto costo y tiene gimnasia en el andarivel de las licitaciones públicas. De este modo, la empresa representará un portafolio que según pudo saber Pharmabiz, se traduce en una facturación cercana a los u$s 32 millones anuales, la que al sumarse, duplicará el tamaño actual de Biosidus en Argentina. A su vez, se estima que el laboratorio incorporará entre 25 y 30 colaboradores, de los 45 que conforman la actual grilla de Sandoz. Estos últimos podrían ser reubicados en la filial chilena, entre otros destinos.
En el arranque, los productos seguirán rotulados bajo Sandoz, hasta que se completen los clásicos procesos de transferencia de registros. En ese plan, Biosidus tiene previsto realizar la etapa de control de calidad en su planta ubicada en el barrio porteño de Almagro. Asimismo, la empresa está súper entusiasmada con la idea de lanzar algunos de los 15 nuevos biosimilares de Sandoz que están en carpeta en Europa, y que en Argentina ya serían presentados por Biosidus. Ver Bio Summit.
Son en total 17 marcas, las que quedarán en manos de Biosidus. En ese paquete resaltan el cuarteto de biosmilares, Omnitrope; Rixathon; Erelzi; y Hyrimoz. Además de los bios, también se listan los inmunosupresores Tacrolimus, y MMF; los productos enrolados en el segmento de sistema nervioso central, tal como los antiparkinsonianos Comtan, y Stalevo; y el antidepresivo Anafranil. También el vasodilatador Treprostinil; el antibiótico Bioclavid; el antiviral Valganciclovir; los antifúngicos Caspofungina, y Voriconazol; y el tratamiento contra el HIV Padviram. Figura asimismo, el inhibidor de resorción ósea Aclasta, y el agonista LHRH Lectrum.
Mientras tanto, hay productos de baja escala y que desde hace rato corren bajo carry over, es decir, sin actividad promocional. Son el mucolítico ACC Expectorante; el antiprostático Tamsuna; el quelante Sevelamer; el antimicótico Caspofungina y el antiemético Zofran. Los mismos seguirán bajo el paraguas de Novartis, hasta que se complete el spin off.
En paralelo, cabe mencionar, que el resto de los mercados de la región seguirán sin cambios para Sandoz y también bajo el modelo de representantes, a excepción de Chile. En Paraguay, el partner es Casa Boller y en Uruguay, su brazo es la droguería Scienza. De hecho, el argentino Diego Albuixech continuará con base en Chile para quedarse controlando Chile, Argentina, Uruguay y Paraguay. A su vez, al frente de Brasil, el que continúa firme es el también argentino Marcelo Belapolsky.
A nivel global, Sandoz sin embargo, está súper enfocado con sus biosimilares. En sus últimos resultados financieros exhibió un crecimiento del 4% y una facturación de u$s 9.249 millones en el 2022. Ver balance financiero.
La estrategia implementada por Sandoz en la Argentina se encuentra en sintonía con la desplegada por la norteamericana Eli Lilly dos años atrás, cuando la empresa determinó retirarse por segunda vez del país y dejó sus productos bajo el ala del nacional Raffo. Más recientemente, la española Grifols también dio un paso en esta línea. La compañía especializada en hemoderivados se corre del mercado local en los próximos meses y parte de su portafolio estaría representado por empresas locales, tales como la nacional Felsan. Ver artículo Eli Lilly / Ver artículo Grifols.
A nivel global, Sandoz avanza en su proceso de spin-off de Novartis. En febrero, la multi anunció el nombramiento de Gilbert Ghostine, el entonces CEO de Firmenich, como su presidente; y más recientemente, en mayo, aprobó la conformación de su Junta Directiva. Ver artículo CEO / Ver artículo Junta.