Los medios nacionales le dan seguimiento a las particularidades que enfrentan diferentes industrias. Por caso, se afirma que las restricciones a las importaciones, podrían tener su pertinente impacto sobre el sector exportador. También se reflejó la realidad en el rubros de los electrodomésticos y hasta en la industria del papel.
A partir de las recientes restricciones de la AFIP, los exportadores alertaron que las nuevas trabas para importar imposibilitaría la entrada de insumos para que las empresas produzcan sus productos y, esto, impactaría en las ventas al exterior. Camila Dolabjian reflejó, en La Nación, que la Cámara Argentina de Comercio y Servicios solicitó una mayor trazabilidad y mecanismos más flexibles para la conformación del Sistema de Capacidad Económica y Financiera, con el fin de evitar obstaculizar, aún más, las importaciones. Ver artículo La Nación.
El mercado de los alquileres vuelve a estar en la agenda oficial. En Clarín, Natalia Muscatelli detalló que la semana próxima habrá una reunión clave entre los representantes de la Cámara Inmobiliaria Argentina y la Federación de Inquilinos. El diagnóstico que hace el entorno del secretario de Comercio, Roberto Feletti, es que existe un gran desfasaje entre los inquilinos que quieren alquilar y no pueden afrontar las mensualidades y una cantidad importante de viviendas vacías que podrían sumarse a la escasa oferta disponible en el mercado locativo. Ver artículo Clarín.
El mercado de los electrodomésticos y televisores, en tanto, es otro de los sectores que puede afrontar subas, de hasta un 30%, debido a un factor poco conocido por la gente: el precio del aluminio. El mismo, en el último tiempo, se disparó hasta superar los u$s 3 mil la tonelada. Según un artículo de IProfesional, esto representa su valor más alto desde 2008 y puede causar efectos importantes, tanto en los mercados bursátiles como en el precio de los productos de consumo masivo. Durante el 2021 aumentó un 42% y, únicamente en lo que va del año, ya se registra un 14% más arriba. Ver artículo IProfesional.
La falta de papel asimismo, es otro tema que surge crítico para el sector editorial. En Infobae, Pablo Raimondi consignó que, si bien hay problemas para imprimir libros, esto no estaría afectando a las multinacionales del mercado literario. Las editoriales independientes e imprentas denunciaron un trato desigual de la principal empresa proveedora. Por su parte, el presidente de la Cámara Argentina del Libro, Martín Gremmelspacher, planteó el complejo momento que atraviesa la industria, y las fuentes imprenteras razonan que, ante este panorama de escasez, no quedaría otra que mirar fronteras afuera de la Argentina. Ver artículo Infobae.