Reckitt Benckiser cambia el rumbo. Quiere pisar más firme en el campo de Health Care. Ahora sumó a una empresa de fórmulas infantiles. Se diversificará con las marcas Enfabebé y Enfamil.
La británica Reckitt Benckiser le dio un volantazo a su negocio. Adquirió y lo hizo oficial hoy, al publicar sus resultados anuales, a la compañía de fórmulas infantiles Mead Johnson, la que surgiera como un spin off del laboratorio norteamericano Bristol Myers Squibb. Ver Press release
La transacción se cerró por u$s 17.9 mil millones, y superó a la oferta inicial que fuera por u$s 16.7 mil millones. Esta cifra, según lo detalla la agencia Bloomberg, surge de multiplicar por 17 las ganancias de Mead Johnson. Ver artículo Bloomberg
Reckitt es la dueña de Espadol y tiene en su portfolio de domisanitarios a Vanish, Harpic y Woolite. La firma tiene planta propia en Florencio Varela. Mientras que Mead Johnson está en la otra punta del mapa, en Munro, frente al Unicenter.
Es un número bastante menor que el que realizó Nestlé cuando compró a la unidad de fórmulas infantiles de Pfizer en el 2012. Mucho más bajo aún que el que desembolsó Danone cuando compró a Numico en el 2007. El múltiplo que realizó Pfizer en ese momento fue de 20 y el de Danone de 22.
La operación tendrá el soporte financiero del Bank of America Merrill Lynch, el Deutsche Bank y el banco HSBC. Implicará u$s 9 mil millones en créditos que se saldarán en un plazo que puede ir de 3 a 5 años y también acudirán a otro tipo de instrumentos financieros.
El principal objetivo de Reckitt es extenderse en mercados en los que ahora no tiene tanto peso. Para esto se sube a la plataforma de Mead Johnson que se asienta en Asia y América Latina, a donde deriva el 67% de sus ventas netas.
A su vez, las expectativas de ascenso para Mead Johnson no son nada desdeñables. RB dice que su crecimiento será del 3% a 5% anual, en el mediano y largo plazo.
El producto estrella de Reckitt en el mercado local es Espadol. Además tiene a los domisanitarios Vanish, Harpic y otros. Y en el segmento de Health Care compite con los medicamentos de venta libre Gaviscon y Strepsils. También se apoya en la línea pédica Amopé y la de depilatorios Veet. Y aunque no en la Argentina tiene a los preservativos Durex y a los geles íntimos Ky. Es justamente este segmento el que va a reforzar sumando a las fórmulas infantiles. Ver artículo
En la Argentina, los cerca de 100 empleados de Mead Johnson están más que expectantes. La transacción espera cerrarse durante el mes de septiembre de este año e implicará un gran cambio para la filial local.
Impacto local
La gran arista de esta noticia es sopesar el impacto que esta transacción de carácter global podría tener en la Argentina. Esto es porque ambas compañías tienen presencia en el país y sobre todo Reckitt, que muestra un peso significativo.
Al mando del argentino Carlos Daireaux, Reckitt tiene sede en el partido de Florencio Varela, al sudeste del Gran Buenos Aires, donde además opera con planta propia. En la otra punta del mapa, está Mead Johnson, que cuenta con oficinas en Munro, muy cerca del Unicenter Shopping.
Su CEO local es el también argentino Andrés Lefebvre, quien se hizo cargo de una compañía que en el 2012 había cerrado un joint venture regional con la argentina Sancor. Esta es la clave de por qué esta transacción tendrá un peso significativo en el continente.
Competidores de pecho
Los nuevos competidores que RB tendrá enfrente al pisar este novedoso terreno no son niños de pecho. Se trata en primer lugar de la gigante Danone, que en la Argentina adquirió hace más de una década la línea de Nutricia Bagó. La misma sigue utilizando el respaldo de dicha marca, para beneficiarse del peso que el laboratorio tiene en el mercado local. Sin embargo, ya no posee ninguna relación desde largo tiempo atrás.
A otra de las que deberá enfrentar es a la suiza Nestlé, aunque la misma tiene un protagonismo más reducido en la Argentina.