No todo es coronavirus en materia de consumo masivo. Así por caso, Genomma sale a reposicionar su fitoterápico QG5, con mujeres como protagonistas.
El intestino sensible es el eje de una reciente campaña de los mexicanos de Genomma creada especialmente para su antiespasmódico QG5.
Así, la firma latina se corre por un rato de la agenda del COVID-19, que se adueñó de la tanda publicitaria. En el spot son tres mujeres las que se hacen cargo de este malestar: una «fabricante» de pastas; una celadora escolar y una tercera, cuya profesión no está delimitada.
A cámara explican que tienen espasmos, cólicos, inflamación, gases y que luego del fitoterápico a base de guayaba ahora sienten la diferencia. QG5 compite con otros antiespasmódicos populares, como la Buscapina, de la francesa Sanofi; el Bagóhepat del nacional Bagó; y la Paratropina, del también argentino Lazar, entre otros.