Después de un 2020 de derrumbe para las fragancias de lujo, las compañías del sector empiezan a recuperarse. En el marco del pre lanzamiento de Phantom de Paco Rabanne, Puig puso en marcha una campaña omnicanal con más de 100 pop up stores en aeropuertos de todo el mundo.
Las restricciones a las reuniones sociales y a los viajes internacionales impactaron de manera directa en la categoría de perfumería y belleza a nivel global. Ahora, en este 2021, con flexibilizaciones de las cuarentenas en muchos países, el mercado ya comienza a ver un rebote.
En ese contexto, la española Puig implementó una campaña de pre lanzamiento de la fragancia Phantom, de Paco Rabanne, en el segmento de Travel Retail. La multi instaló más de 100 pop up stores en aeropuertos de Europa, Medio Oriente, África, Asia Pacífico y la región Américas. Ver artículo.
Las activaciones acompañan la presentación del producto que posee un «aroma futurista«, según informó la firma. En los pop up stores los consumidores se encuentran con una experiencia omnicanal, donde podrán competir con sistemas de inteligencia artificial a fin de ganar premios, escanear códigos QR para acceder a playlists, entre otras propuestas. Además, toda la inversión está apalancada por mensajes en las redes sociales y en plataformas digitales.
El año pasado la facturación de Puig se hundió un -32%, a € 1.537 millones frente a los € 2.029 millones de ingresos que había anotado en el 2019. Incluso, su negocio de Travel Retail vio un derrumbe del -71% según el reporte de resultados, ante el cierre de fronteras en casi todo el mundo. En la plaza local, la filial argentina de la compañía catalana está comandada por Pablo Mortstedt. Ver artículo Puig: fuerte caída en ventas 2020.