La planta en Rocky Mount, en Carolina del Norte, de la estadounidense Pfizer sufrió graves daños a causa de un tornado. Allí se producen casi el 25% de todos los inyectables estériles utilizados en los hospitales de EEUU. El site, se constituye en uno de los más grandes del mundo en su tipo.
Un tornado hizo destrozos en la planta de inyectables estériles que la norteamericana Pfizer tiene en la ciudad de Rocky Mount, en el estado de Carolina del Norte, donde trabajan unos 400 empleados.
Un portavoz de la compañía en un comunicado enviado por correo electrónico confirmó a Reuters los daños y dijo que internamente se estaba evaluando la situación para determinar el impacto en la producción. Ver Reuters.
Los empleados de la compañía en la planta pudieron ser evacuados y están a salvo, agregó el comunicado. En el site, considerado uno de los más grandes del mundo en su tipo, se elabora casi el 25% de los inyectables estériles de Pfizer utilizados en los hospitales de EE.UU.
En esta instalación, además, se producen una amplia gama de productos, que incluyen anestésicos, analgesia, terapéuticos, antiinfecciosos y bloqueadores neuromusculares. Estos productos están disponibles en presentaciones de pequeño volumen, como ampollas, viales y jeringas. Ver website.
Las plantas «caídas» por fenómenos climáticos, no se constituyen en un hecho nuevo para el sector. En la Argentina, por caso, existen dos casos de referencia. Uno fue el ocurrido en la Semana Santa del año 2012, cuando las instalaciones de los nacionales de Roemmers en el porteño barrio de Mataderos se vieron seriamente afectadas. Ver Temporal en planta Mataderos.
Y una década después sucedió algo similar con la estructura de la distribuidora Disprofarma, que registró serios daños en su operación. La compañía, propiedad del grupo Bagó y del nacional Elea, se encuentra ubicada en el barrio porteño de Villa Soldati, en Av. Castañares 3222 Ver Disprofarma: destrozos por el temporal.