El diario Financial Times realizó un análisis del estado de cosas para el grupo Novartis después de la salida de Daniel Vasella, firmado por el periodista Tony Barber y que hoy levanta el diario El Cronista. Ver artículo.
Daniel Vasella, fundador del grupo, se jubiló en febrero pasado y dejó su cargo como presidente del directorio.
Según el FT, bajo la conducción de Vasella, Novartis se convirtió en el grupo farmacéutico más grande de Europa.
Aunque el diario a la vez se pregunta. ¿El grupo realizó adquisiciones inteligentes? ¿Resolvió el llamado precipicio de las patentes que enfrenta la compañía?
Según Barber, «el Novartis post Vasella tendrá la oportunidad de reconsiderar algunas inversiones que él hizo y algunas de las estructuras corporativas que él armó».
Afirma que una adquisición que no funcionó fue la operación en la que por u$s 5.100 millones, Novartis adquirió en 2006 el control total de Chiron, un fabricante norteamericano de vacunas.
Dice FT que «el fracaso de Chiron es uno de los motivos por los que la unidad de Novartis dedicada a vacunas y diagnóstico es la peor en desempeño de las cinco divisiones que tiene el grupo».
Es así que se especula que Joseph Jimenez, el CEO, podría optar por incorporarla a la división de fármacos, la más importante, que representa el 56% de las ventas del grupo, comparado con el 3% de las vacunas.
Según el diario, «eso simplemente disfrazaría las debilidades de una unidad que nunca ganará terreno frente a los líderes del mercado de vacunas, como GSK, Merck y Sanofi. Sería mejor vender todo o la mayor parte del negocio».
Otras dos operaciones de la era Vasella complican a algunos inversores, según el diario.
La compra de Alcon por u$s 51.600 millones, completada en 2010, convirtió a Novartis en la compañía para el cuidado oftalmológico más grande del mundo.
De acuerdo a este análisis, fue a un precio muy alto y los resultados de Alcon hasta la fecha apenas lo justifican.
«Tiene más sentido que Novartis conserve Alcon, que es un genuino líder del mercado, y no la participación en el rival suizo Roche que Vasella adquirió entre 2001 y 2003. Frustrado su plan de quedarse con todo Roche, Vasella terminó quedándose con 6,2% del capital», puntualiza FT.