La reforma permanente fue uno de los ejes de su discurso post urnas. Hizo hincapié en los cambios tecnológicos y en la cultura de la avivada.
El presidente Mauricio Macri dio su discurso hoy al mediodía frente a una audiencia conformada por dirigentes empresarios y sindicales, funcionarios de gobierno y otros actores claves, en el centro cultural Néstor Kirchner.
En ese escenario el mandatario puso el hincapié en la necesidad de pensar una agenda de reforma permanente. «No podemos seguir debatiendo realidades como si viviéramos en otro siglo», dijo. Y agregó que los cambios tecnológicos están planteando debates estructurales sobre el trabajo, el conocimiento y sobre la vida misma.
El presidente apuntó a tres ejes de trabajo. El primero es el de la responsabilidad fiscal, la inflación y los impuestos. El segundo es el del empleo y el tercero el de la institucionalidad.
Macri afirmó que Reformar el país es darle las alas que necesita para volar en el mundo de hoy. Apeló también a volverlo dinámico y capaz. «Tenemos que avanzar en reformas en los que cada uno ceda un poco, empezando por los que tienen poder, y no solo hablo de la política», subrayó.
El presidente dijo que quiere concentrarse hoy en tres ejes: el primero es el de la responsabilidad fiscal, la inflación y los impuestos. Remarcó: «no podemos gastar más de lo que recaudamos, en todos los niveles del Estado».
Agregó también que hay que bajar la inflación y que hay que comprometerse para que la inflación nunca más vuelva a ser un instrumento de la política. Además apeló a reducir la carga tributaria, diseñando un sistema de impuestos equitativo y sustentable.
Respecto del eje del trabajo, el presidente dijo que se presentarán algunas iniciativas para combatir los excesos en la litigiosidad laboral y en pos de combatir a la mafia de los juicios laborales.
Al referirse a la inflación, el primer mandatario dijo que este año será la más baja desde el 2009. Puntualizó que no es posible crecer sostenidamente, ni generar empleo sino se baja la inflación. Detalló que la inflación alta arruina el ahorro y lastima la inversión.
Sobre los impuestos, puntualizó que Argentina tiene impuestos demasiado altos e impuestos que no existen en ningún otro país. Definió al sistema impositivo como complicado y engorroso y enfatizó que la peor distorsión es sin dudas la evasión fiscal.
El segundo eje planteado fue el del empleo. Invocó a avanzar hacia un esquema de reglas de juego que fomenten el empleo privado formal. A su vez adelantó que en los próximos días se van a presentar algunas iniciativas orientadas a crear nuevas formas de contratación y a combatir los excesos en la litigiosidad laboral.
El tercer y ultimo eje desarrollado fue el de la república y la calidad institucional. Convocó a todos los sectores a colaborar el fortalecimiento de la república y a construir un Estado que no esté al servicio de sus funcionarios o de sus gremios, sino al de los argentinos. Admitió que esto implicará dos tipos de reformas: en la justicia y en el sistema electoral.