Afirman que tienen el 89% de las plantas productivas que hay en el sector y abastecen al 59% del mercado interno medido en unidades. Destacaron también la performance en los mercados externos
«Tener una industria farmacéutica nacional significa independencia, desarrollo, inversión y competencia«, dijeron en la Cámara de Industriales de Laboratorios Farmacéuticos Argentinos (CILFA), en un evento en el que convocaron a todo el sector para celebrar su 40° aniversario.
En este marco, el ministro de Salud, Ginés González García, destacó que «no hay que olvidar que en la época de la desnacionalización de la industria argentina las farmacéuticas locales siguieron apostando y nunca se retiraron de la pelea«.
La puja entre laboratorios nacionales y multinacionales encontró su momento más tenso en los noventa, cuando «CILFA debió emprender una dura batalla para mantener en el país un mercado competitivo a través de la defensa de una ley de patentes que permitiera a la población tener precios accesibles; a las empresas argentinas continuar el desarrollo de sus actividades, y al Estado, encarar políticas de salud sustentables para los argentinos«.
Las marcas locales de medicamentos abastecen a través de 90 plantas industriales el 59% del mercado interno, mientras que el 41% restante corresponde a las colocaciones de los laboratorios de origen extranjero. Y la nacionalidad en este caso siempre ha sido un elemento diferenciador para un sector que se suele considerar como estratégico. Dicen, por ejemplo, que es de vital importancia una industria nacional fuerte ante el caso de una situación de desabastecimiento o cualquier otro escenario generado por una puja de intereses de carácter global.
En CILFA también destacaron la performance de sus miembros en los mercados externos. Dicen que las exportaciones que el país realizó en medicamentos fueron de u$s270 M durante el 2003. Y de ese total, 40% fueron originadas en la industria nacional. En ese contexto podrían mencionarse algunas empresas que sobresalen fronteras afuera. Por ejemplo, el Instituto Massone, que está exportando a Europa, Asia, América y Africa. También Bagó, que alcanzó ventas por u$s10M anuales fundamentalmente en América latina, Rusia, China y otros mercados asiáticos.
Gador, que además de sus colocaciones de productos terminados también está exportando materias primas a los Estados Unidos, que en total superan los u$s8M anuales. Phoenix ya sobrepasó los u$s5M en carácter de ventas externas, Gramon con fuerte presencia en el mercado de Turquía superó los u$s7M y Roemmers está vendiendo principalmente a América latina por u$s10M.
En la búsqueda de nuevos mercados, González García destacó la presencia del sector en la comitiva que acompañará al presidente Néstor Kirchner en su viaje a China. En este marco bilateral esperan que la industria local pueda tener muchas chances en su rol de industria transformadora para ser complementaria del gigante chino que se caracteriza por ser un gran fabricante de principios activos.
Por Cristina Kroll
