La Cofarmen pelea 80% del farma cuyano
La Cooperativa Farmacéutica de Mendoza (Cofarmen) estará lanzando su línea de champúes y cremas con marca propia.
«El objetivo es posicionarnos ante el consumidor y fidelizarlo entre las farmacias que son nuestros clientes al tiempo que expandir nuestra marca en la región«, dijo Sergio Tertusio, de la Cofarmen. Los productos serán elaborados por el laboratorio mendocino Ethicus, que también manufacturan los tratamientos en base a pepitas de uva que se ofrecen en el Park Hyatt de Mendoza.
La Coa¿farmen es una de las pocas droguerías de origen cooperativo que logró sobrevivir en la década del ’90 y a estas horas retiene 65% de participación en el mercado cuyano. No obstante, Tertusio explicó que en los próximos cinco años «esperamos alcanzar 80% de penetración«.
Los socios de las droguerías son las propias farmacias que le compran a la cooperativa las medicinas y los artículos de higiene y de belleza para vender directamente al consumidor final.
La frustración de los ’90
Durante los ’90 fueron varias las droguerías de origen cooperativo que fueron cayéndose en un literal efecto dominó. La Cooperativa Farmacéutica de Quilmes, la Macofar de La Matanza, la Platafar de La Plata y la Codefasa de Santiago del Estero fueron algunas de las que no sortearon las dificultades de la época. Sin embargo, algunos analistas consideran que en la era K las entidades de este tipo de configuración podrían volver a tomar impulso, de manera parecido a lo que sucede en el campo de las telecomunicaciones, donde las cooperativas regionales están tomando peso frente a las incumbentes.
En el caso del sector farmacéutico, el objetivo de estas estructuras fue cubrir áreas regionales de distribución y operar al mismo tiempo que las droguerías líderes, que llegan a todo el territorio argentino. Sin embargo, en Mendoza, ni Droguería del Sud ni Americana Monroe o la Suizo Barracas logran desbancar a la local.
La Cofarmen, que factura $150 millones anuales, adquirió en 1995 la Cooperativa Farmacéutica San Juan y a estas horas nuclea a 500 socios en la región de Cuyo.
En la droguería están impulsando un plan de certificación de calidad para las farmacias de Cuyo -un hecho innovador en este sector-. Bajo el paraguas de Isofarma, esperan que los puntos de venta acrediten nuevos estándares de cara al consumidor. Lo más destacado es el programa que implementaron junto con la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) para controlar la cadena de frío en todos los puntos de venta.
Cristina Kroll