Bio Sidus ya lanzó Bioflora para competir con las lácteas que también comercializan lactobasilus
Bio Sidus ya acomodó Bioflora en las estanterías de las farmacias. Y aunque es el primer probiótico de venta bajo receta que se expanderá en el mercado local, los consumidores conocen otros muy populares: Yakult, SanCor Bio, Yoguirísimo con probio 2 y Actimel, por lo cual, a pesar de que Bioflora es un medicamento y el resto están categorizados como alimentos, de alguna manera entrarán en competencia. Es que cada vez más se acercan los negocios alimentarios a los de farma de acuerdo con la tendencia de los nuevos consumidores en busca de productos que contribuyen a la calidad de vida.
Como Bioflora puede comercializarse sólo bajo prescripción y en la Argentina hay restricciones para realizar comunicaciones publicitarias de medicamentos bajo receta, la compañía está dirigiendo su artillería de marketing a los médicos. Librarán una dura batalla contra las lácteas, que tomaron métodos de la industria de la salud y salieron a seducir a gastroenterólogos, pediatras y clínicos.
Bioflora es un medicamento que requiere cadena de frío. Y esto quizá signifique una traba para la compañía, ya que no tendrá ninguna chance de entregar las clásicas muestras médicas, uno de los puntos estratégicos al que acudirán para diferenciarse con los alimentos.
Por un lado aseguran que el producto mantiene sus propiedades por 24 meses, al tiempo que se diferencian de los lácteos en que los distribuidores masivos sólo extienden su responsabilidad hasta la llegada de la góndola. Hay otra diferencia básica. Los lácteos los consumen personas sanas, mientras que Bioflora es para quienes presentan desórdenes gastrointestinales.
Si bien los alimentos pueden constituirse en competencia, también hay que decir que les allanaron el camino. El caso más recordado es el de Yakult, cuyas ventas el año pasado saltaron de 9.500 unidades diarias a 53.000. Y Bio Sidus decidió investigar en este nicho porque tomó nota del interés por los probióticos en el mundo, desarrollo que también se dio en la Argentina.
Según ACNielsen, entre mayo del 2001 y mayo de este año se vendieron 7 millones de litros de probióticos y se facturaron $26 millones. Mientras que entre mayo del 2000 y mayo del 2001 vendieron 4,3 millones de litros y se facturaron $9,5 millones.
En esta pelea Danone tiene 58% de la torta; SanCor, 31,5% y Yakult 10,5 por ciento. Algunos analistas le garantizan a Bioflora buena facturación, no sólo por la tendencia del negocio en crecimiento, sino también por el nombre del producto: sencillo, fácil de recordar y ligado a la aplicación para la que es recomendado.