La británica GSK abrió un centro de alta tecnología en Singapur, para testear el comportamiento de los consumidores en los mercados emergentes.
La británica GSK puso su termómetro en el consumo. La compañía abrió un centro de alta tecnología para testear el comportamiento de sus clientes.
El «laboratorio», ubicado en Singapur, está enfocado en analizar qué quieren los consumidores, por qué toman las decisiones que toman mientras hacen sus compras, y qué es lo que determina esas elecciones. Ver artículo.
GSK explica que abrió esta iniciativa para testear el consumo en los mercados emergentes. Sin embargo parece que su gran foco es Asia ya que Latinoamérica, que es una gran región emergente, claramente tiene características muy distintas a las del consumidor asiático.
La multi hace rato que tiene el foco en el consumo. Recientemente había presentado en un video otro de sus «laboratorios», ubicado en Norteamérica. Allí tiene, por caso, una pared virtual interactiva, en la que con un dedo los ejecutivos pueden mover los productos de un estante a otro para diseñar estratégicamente la distribución de sus marcas en las góndolas.
