La FDA propuso restricciones de edad y medidas de seguridad para el uso de las camas solares. Ver comunicado.
La primera regla reduciría el uso de estos artefactos sólo a personas mayores de 18 años.
Además, antes de la primera sesión de bronceado, y cada seis meses a partir de entonces, los usuarios tendrían que firmar una certificación de reconocimiento de riesgos.
La segunda regla propuesta requeriría que los fabricantes de camas solares y los locales de bronceado tomaran medidas adicionales para mejorar la seguridad.
Entre ellas destacan que las advertencias deben ser fáciles de leer, incluir un interruptor o botón de pánico, mejorar la protección de los ojos y prohibir modificaciones en los dispositivos sin previa certificación de la FDA.