La agencia regulatoria norteamericana otorgó una reducida cantidad de avales en este octubre. Aunque dio la nota con la venia concedida a la primera terapia para el COVID-19. Se trata de Veklury de la farmacéutica Gilead.
En el décimo mes de este 2020 atípico, el ritmo de aprobaciones de la FDA se desaceleró. Tal es así que solamente se destacaron dos novedades a lo largo de este período.
Uno de los medicamentos avalados fue Veklury de la norteamericana Gilead, que se constituyó como el primer tratamiento para casos de COVID-19 que requieran hospitalización. El producto, a base de remdesivir, está indicado para adultos y niños desde los 12 años, que tengan un peso de al menos 40 kilos. Aunque el OK no incluyó a toda la población que había sido contemplada bajo la Autorización de uso de emergencia (EUA) emitida originalmente en mayo. Ver artículo Veklury.
Además, la agencia le dio luz verde a Inmazeb de la norteamericana Regeneron. Se trata de la primera terapia para el Ébola en adultos y niños, incluidos los recién nacidos de madres que hayan dado positivo. La compañía desarrolló este biológico que combina tres anticuerpos monoclonales, con la misma tecnología de respuesta rápida utilizada en los anticuerpos para el COVID-19 que tiene en investigación. Ver artículo Inmazeb.