Ahora los hackers fueron por la EMA, el organismo regulatorio europeo. Según BioNTech, la firma alemana detrás de la primera vacuna anti COVID-19 aprobada en occidente, accedieron a documentos sobre vacunas.
Los ciberataques contra datos relacionados a las vacunas COVID-19 siguen activos. Después de que varias empresas e instituciones reconocieran intentos de romper su seguridad cibernética en los últimos meses para acceder a información sobre vacunas, ahora le tocó al regulador europeo.
La Agencia Europea de Medicamentos -EMA por sus siglas en inglés- advirtió que registró un ciberataque. La agencia, que actualmente se encuentra en plena evaluación de las vacunas anti COVID-19 de Pfizer/BioNTech y de Moderna, publicó un escueto mensaje avisando que está investigando el caso con las fuerzas de seguridad y otras entidades. Asimismo consignó que no podrá dar más información durante la investigación. Ver aviso de EMA.
Sin embargo, la biotech alemana BioNTech ya detalló que los hackers accedieron a documentos relacionados con la vacuna que desarrolló con Pfizer y que ya fue aprobada por el Reino Unido, Canadá y Bahrain. La multi dijo que la EMA le informó que «se accedió ilegalmente a algunos documentos relacionados con la presentación reglamentaria» de su candidata.
De modo que no queda claro cuándo o cómo tuvo lugar el hackeo ni quién habría sido el responsable. Los intentos de piratería contra organizaciones sanitarias y médicas se han intensificado durante este 2020 de pandemia, ya sea lanzados por aparentes espías respaldados por Estados nacionales o por ciberdelincuentes. Incluso ya se ha acusado a China, Irán, Corea del Norte, Rusia y Vietnam de respaldar a hackers que intentaron robar información sobre el virus y sus posibles tratamientos, desatando una guerra de inteligencia internacional. Ver artículo.
El Centro Nacional de Seguridad Cibernética de Gran Bretaña, el primer país donde obtuvo el OK la vacuna de Pfizer y BioNTech, avisó que también está investigando este nuevo ataque.
BioNTech por su parte resaltó que no se había violado ningún sistema propio o de Pfizer y que no tenía «conocimiento de que se haya accedido a los datos personales de los participantes del estudio».
La empresa dijo que la EMA le informó que el ataque no cambiaría los tiempos para la evaluación de su vacuna en Europa. Por su parte, el laboratorio norteamericano Moderna avisó que la agencia regulatoria no le dio detalles respecto de a qué documentos de su vacuna se tuvo acceso durante el hackeo.