Coty difundió hoy sus resultados semestrales en donde reportó una caída en ventas del -5.6%. El negocio que más se derrumbó fue Consumer Beauty, que se fue a pique con un declive del -15.6%.
La multinacional de cosmética Coty publicó esta semana sus resultados financieros semestrales correspondientes al año fiscal 2020. Lo hizo a contrapelo de la mayoría de las corporaciones internacionales que a estas horas difunden sus informes anuales. Ver press release.
De acuerdo a lo reportado, la compañía registró una caída en sus ventas globales del -5.6% respecto al mismo período del año fiscal anterior. Esta cifra se tradujo en ingresos por un total de u$s 4.2 mil millones.
En cuanto a sus unidades de negocios, el desempeño fue muy dispar. En principio, Consumer Beauty -que comprende marcas como Sally Hansen; Rimmel; y Max Factor– derrapó un -15.6% en ingresos reportados a nivel global, y un -8.1% si se los mide de forma orgánica. Coty detalló que este declive se debió por caso a la pérdida de espacio en las góndolas frente a sus competidores, y al debilitamiento del mercado masivo de belleza en Estados Unidos. El descenso también se fundamentó en la decisión de reducir las ventas a canales de menor valor en países seleccionados.
En tanto, sus otras dos divisiones arrojaron números positivos aunque no lograron un crecimiento destacado. Por un lado, el segmento Professional ascendió un 1.4% durante el primer semestre. Mientras que su negocio de Lujo reportó una suba en ventas de apenas un 0.7%, salvándose con sus fragancias Burberry; Gucci; Tiffany; Hugo Boss; y Lacoste.
Por último, la corporación le dedicó un párrafo especial al comportamiento que tuvo en las diferentes regiones en las que opera. Explicó que la zona ALMEA que incluye a Medio Oriente y América Latina le representó el 23% de sus ventas totales; después de Norteamérica que le significó el 27% de sus ingresos; y de Europa que se llevó el 50% de la torta.