La pandemia vio nacer y consolidar a distintos emprendimientos de cosmética que encontraron en la venta online un gran punto de apoyo, y en este 2023 la demanda se sostiene. Pharmabiz realizó un relevamiento de las diferentes iniciativas que se comercializan por fuera del canal tradicional y cuál es su status en el mercado.
Después de dos años de fuertes caídas en el segmento de la cosmética -en particular el make up-, en el 2022 y este 2023 algunas compañías se reinventaron con artículos de cuidado personal, una categoría que sufrió menos la merma en la demanda.
Además, aparecieron propuestas veganas, orgánicas y libres de gluten. Así, los emprendimientos se apalancaron en las redes sociales y en los canales online -propios o de terceros- para posicionarse por fuera de los comercios tradicionales.
Florencia Villamil Delfabro e Ignacio Conde iniciaron hace una década su emprendimiento de Boti-K, una línea que comenzó siendo exclusivamente de jabones. Ahora, en este 2023 la startup que vende sus productos online, en tiendas de bienestar y en algunas farmacias sumó los labiales con la marca Puro. Ver artículo Boti-K.
Sri Sri Tattva fue creada por Michael Levy, un emprendedor francés que vivió desde chico en la Argentina, y que en 2015 hizo el desembarco de su marca en el país. La línea, fundada en India en 2003, incluye productos de cosmética ayurvédica, su principal diferencial. Además, están inscriptos en ANMAT y, según un artículo de La Nación, la firma está en tratativas para ingresar también medicamentos provenientes del país asiático. Ver artículo LN. Ver perfil de Instagram.
Be Kind nació a partir de la experiencia en la industria de farma de Adriana Higa, cuando terminó su ciclo en la mexicana Genomma como gerente de Desarrollo Galénico y Analítico de productos Cosméticos y Farmacéuticos en marzo del 2019. La iniciativa se destaca por sus coloridos packagings para vender jabones, champúes y acondicionadores sólidos, y aceites naturales, entre otros. Ver artículo Be Kind.
Semilla, fundada por Leandro Pintos, un farmacéutico con experiencia en la industria local surgió en el 2018 como una empresa de esmaltes y se fue expandiendo hacia otras categorías. Actualmente comercializa cremas corporales y de manos y champúes sólidos, entre otros artículos que son elaborados por terceristas. Así, está presente tanto en el canal físico -que representa el 60% de las ventas– como en el online -que se lleva el 40% restante-. Ver perfil de Instagram.
En marzo del 2018, desde Neuquén, se lanzó al mercado Materia Orgánica (Mo) Patagonia, una etiqueta basada en la naturaleza y la alquimia, según definen desde la empresa. La cartera está compuesta por bálsamos, brumas faciales, aceites y exfoliantes, entre otros, y se encuentra a través de la plataforma creada por Tienda Nube. En este caso no se aclara si se cuenta con el aval de la ANMAT. Ver perfil de Instagram.
Bőr es una línea de cosmética natural de tradición familiar, creada en el 2021 por Carolina Di Carlo a partir de las fórmulas elaboradas en húngaro por su abuela, Rosita Borsits. Los productos, que van desde cremas, serums y protectores solares, cuentan con la certificación de la ANMAT y se comercializan a través de la plataforma online de la marca. Ver perfil de Instagram.
Por su parte, en mayo del 2021 surgió Walá, una marca de cosmética natural aprobada por el organismo regulador que encabeza Manuel Limeres. El portfolio propiedad de Noelia Pons se compone por cremas faciales, corporales, serums, bruma, agua micelar, exfoliantes, pads desmaquillantes reutilizables, entre otros elementos para la rutina de skin care. Todos los productos están testeados en humanos y se comercializan a través del sitio web. Ver perfil de Instagram.
Otro de los jugadores que se subió al boom del skin care que generó la pandemia -y el aislamiento obligatorio- fue Lure. Los productos de la marca ideada por Mariana Saric están disponibles exclusivamente en la tienda online. Se incluyen artículos como cremas faciales, protectores solares, emulsiones, make up, y accesorios como vinchas, esponjas, entre otros. Ver perfil de Instagram.
Al listado de emprendimientos que consiguieron el sello de la ANMAT y que se venden por fuera de los canales tradicionales se suma también Bennie. Además de aprovechar la creciente demanda de este tipo de productos, la etiqueta lanzó un portfolio que es 100% natural, vegano, apto celíacos y biodegradable, otra de las modas que se observó en el último año. Ver perfil de Instagram.
En esa línea, Denvor Cosmetics presentó una cartera «cruelty free» que abarca tónicos de limpieza, serums anti age, cremas faciales y corporales hidratantes, sales de baño, por mencionar algunos. En sus redes, la marca formada por profesionales de la salud, dedicados a la dermatología y la nutrición, promociona sus productos incluyendo también a hombres entre su target. La empresa cuenta con venta a través de Internet y de manera mayorista de la mano de revendedores. Ver perfil de Instagram.
Aurelia le puso el foco al cuidado facial con propuestas de solares, brumas, mascarillas, emulsiones, entre otros. La firma creada por Daniela Sánchez, dermatóloga, está disponible en el e-commerce y también se encuentra en algunos puntos de venta del país, con presencia en más de 20 ciudades, según detalla en sus redes sociales. Ver perfil de Instagram.
La médica Lucía Di Tullio creó Ruh Natural junto con Matías Tarnovsky. El portfolio de la marca incluye champúes sólidos, desodorantes naturales, jabones, entre otros artículos libres de plásticos, sin parabenos y sin fragancias sintéticas. Todos ellos, además, están avalados por la ANMAT y se comercializan online, tanto al público como a través de ventas mayoristas. Ver perfil de Instagram.
Gentil es otro de los emprendimientos que se sumó a la competencia en el segmento de la cosmética off. La marca fue craneada por dos hermanas, Lucía y Florencia Agüero, una dermatóloga y otra contadora. A través de su tienda digital llegan a todo el país, con puntos de entrega minorista en Rosario; Marcos Juárez y San Isidro. Además, ya sumaron comercios en otras cinco ciudades que revenden sus artículos de skin care. El portfolio, avalado por la ANMAT, incluye cremas, serum, y gel de limpieza, entre otros. Ver perfil de Instagram.
Las Rishis es otra de las etiquetas que participa en este nicho de cosmética fuera de los canales tradicionales. La marca fundada por Laura Ghiglioni solo se comercializa a través de su sitio web y cuenta con certificación de la ANMAT. En su portfolio se incluyen productos como repelentes naturales para insectos, desodorantes, serums faciales, y artículos capilares sólidos, entre otros.
Y en esta parte de abril el regulador local ordenó un recall de varios lotes de productos, ya que se detectaron desvíos a las Buenas Prácticas de Fabricación por parte del establecimiento elaborador. En este caso, el tercerista fue Laboratorios DermoSoluxion, una empresa propiedad de César y Osvaldo Hurevich. Ver sitio/ Ver artículo ANMAT recall Rishis.
Holista, propiedad de los hermanos Lucila, Manuel y Mariana Verdaguer, es una marca de maquillaje que también pone de relieve el hecho de ser cruelty free y «hecho en Argentina». Los productos «multipropósito» tienen una formula única para ojos, labios y mejillas y están aprobados por la ANMAT, según se aclara en su tienda online. Ver sitio.