Bayer Argentina ya era la número uno en el podio de las medicinas de venta libre -OTC-. Y ahora -con el anuncio de Frankfurt de la compra de la unidad OTC de su competidora Roche, por casi u$s3.000 millones-, seguirá ocupando el primer puesto, pero sacándole varios cuerpos de ventaja a su rival GlaxoSmithKline. La operación crea una empresa que se ubica entre las tres mayores del mundo en remedios de consumo global.
Con las nuevas marcas de Roche -como Redoxon, Supradyn, Rennie, Aleve y Saridon– la compañía alcanzaría en el país una facturación cercana a $210 M anuales, mientras que la británica GMK quedaría segunda con unos $110 millones.
En este país se da un escenario especial, ya que ambas empresas mantienen sendas plantas operativas. Las dos están instaladas en el parque industrial de Pilar y resultan complementarias, ya que los suizos se concentraron en las formas efervescentes y los alemanes, en comprimidos.
La planta de Bayer, donde elabora sus marcas Bayaspirina, Cafiaspirina, Aspirinetas y Yastá, se montó en 1999 con una inversión superior a u$s40 millones. Desde allí abastece a Uruguay, Paraguay, Chile, Bolivia y en parte a Brasil. Con una capacidad de más de 3.000 M anuales, la de Pilar es la fábrica de comprimidos más grande de Sudamérica y una de las tres más importantes del mundo en su tipo.
En tanto, Roche inauguró su planta en el 2011 con una inversión de u$s32,6 M con el objetivo de exportar no sólo a Latinoamérica sino también a Europa y Asia.
En la actualidad, Bayer emplea a 243 personas en esta división, mientras que Roche congrega una cantidad parecida. El número uno de la operación de venta libre de Bayer en la Argentina es Ulrich Klebert, mientras que Victoria de Castillo comanda el mismo sector en el búnker suizo.
Complementación
“En la Argentina se da una de las mejores situaciones sinérgicas de la región”, dijo a Infobae un analista del sector. Sucede que las carteras son complementarias y no compiten entre sí. El mejor ejemplo sea quizás el del complejo vitamínico One a Day que Bayer retiró del mercado argentino y que hubiera entrado en competencia con el Supradyn de Roche.
Si las autoridades antimonopólicas le dan el OK, la transacción estaría cerrada a fin de año por un total de 2.380 M de euros. Además de la planta argentina, el acuerdo incluye el traspaso de cuatro plantas, que se encuentran localizadas en Alemania, Francia, Marruecos y Yakarta. En Bayer afirmaron que, a finales del primer trimestre del 2004, disponían de liquidez por valor de 2.600 M de euros, lo que supone una sólida base para financiar la transacción. Una vez fusionados, los negocios tendrán un volumen de ventas calculado en 2.400 M de euros.
Por Cristina Kroll
