El 2018 sin dudas estuvo marcado por la recesión de la economía y la escalada de la inflación que está tocando el 47,5%. Esto sumado a la mega devaluación de la moneda local que se dio a fines de agosto, resultó por caso en la rescisión del convenio PAMI por parte de los laboratorios nacionales. Fue así que más tarde se rompió con el esquema de comercialización intercámaras para pasar a un formato «uno a uno» con los laboratorios.
Los brindis del 2018 llegaron con recesión y con una inflación de fuste. Así las copas se están levantando con una inflación anual que cerraría en torno al 47,5%. Esto sin dudas es el gran dato que tuvo la particularidad de trocar la tan mentada inelasticidad del sector de los medicamentos. Fue luego de que a fines del 2017 el gobierno realizara una estimación de 15% de inflación para todo el año.
En este contexto lo que talló tanto para el sector de Farma como para el conjunto de las ramas industriales, fue la recesión de la economía que no dio tregua durante el 2018 y se acrecentó tras la mega devaluación de la moneda local que se registró el 30 de agosto, cuando el dólar se disparó y rozó los $40. Ver artículo.
Fue en ese escenario que apenas desatada la crisis de la moneda, las cámaras que nuclean a los laboratorios nacionales tomaron la decisión el viernes 31 de agosto de rescindir el convenio que habían sellado con el PAMI a fines de marzo, argumentando que por ese entonces se esperaba una inflación del 15% y que el dólar cotizaba a $18. Ver artículo.
El avance de los tratamientos «de oro» es imparabale y los mismos son el gran foco de las farmacéuticas a nivel global. Por ello, avanzan las agencias que evalúan la costo efectividad de los medicamentos de última generación. En la Argentina, mientras que el gobierno se muestra fuerte para torcer el brazo de la industria desde el PAMI, no logra darle forma a la AGNET, aunque ya dijo desde hace tres años que estaba en gateras.
Así comenzó una picante puja a la vez que la profundización de la grieta entre el sector privado y el gobierno. En ese contexto los laboratorios terminaron debilitados después de que el PAMI los arrinconara para que rompieran filas con las cámaras y lograra darse el gusto de verlos desfilar «de a uno» a fin de estampar su firma respondiendo por sí mismos y por sus productos. De este modo la gestión de Mauricio Macri consiguió romper luego de 20 años con el bloque intercámaras para pasar a un formato de ventas «uno a uno», lo que significó un barajar y dar de nuevo para todos los laboratorios. Ver artículo.
Aunque la jugada de CILFA y COOPERALA al rescindir el convenio, no salvó a la cámara de las multis del coletazo que ya estaba planificado desde el poder ejecutivo. Durante el 2019 la CAEMe también tendrá que subirse a este nuevo esquema de ventas, el que todavía tendrá más tela para cortar durante el año que está por estrenarse. Así, y por primera vez en la historia, tras la entrada en vigencia del nuevo convenio, el jueves 1º de noviembre, quedaron coexistiendo dos formatos. Por un lado el sector de los nacionales con el renovado acuerdo de ventas por laboratorio; y por otro las multis que aún mantienen el antiguo trato, el que caducará en marzo del año que viene.
Hasta que la AGNET se materialice el gobierno puso en marcha la CONETEC, la Comisión Nacional de Evaluación de Tecnologías de Salud. La misma tomó forma en abril de este año y tiene bajo su paraguas, tres medicamentos en análisis. Los mismos son Spinraza de Biogen; Keytruda de MSD; y Lumiere de Elea. Sin embargo, por el momento ningún resultado sale de su órbita y no se trasluce ningún aporte a la encrucijada que representan el financiamento de los tratamientos de última generación.
Sin embargo la avanzada «uno a uno» no fue la única gran jugada del titular del PAMI, Sergio Cassinotti. También salió a la cancha con el formato de licitaciones para los medicamentos oncológicos. En lo que va del año, abrió tres licitaciones conocidas como «de ferretería» en las que los principales oferentes fueron los laboratorios nacionales enfocados en productos maduros. Aunque el juego se abrió con la licitación para adquirir factor VIII la que terminó convirtiéndose en una bisagra.
No obstante, mientras que el gobierno se muestra fuerte para torcer el brazo de la industria desde el PAMI, deja ver su lado flaco en materia de medicamentos innovadores. Esto es porque aún no logra darle forma a la AGNET, la agencia que en marzo de 2016 se había postulado como la gran respuesta para romper la inercia y la aprobación de tratamientos híper caros y que requieren un financiamiento que impacta y trastoca por completo los presupuestos públicos. Ver artículo. Ver artículo.
Así las cosas parece que el tema realmente no es una prioridad en la agenda parlamentaria. Pruebas al canto, hasta que la AGNET se materialice el gobierno puso en marcha la CONETEC, la Comisión Nacional de Evaluación de Tecnologías de Salud. La misma se activó en abril de este año y tiene bajo su paraguas tres medicamentos «de oro» en análisis. Son Spinraza de Biogen; Keytruda de MSD; y Lumiere de Elea. Aunque por el momento ningún resultado sale de su órbita. Ver artículo. Ver artículo.
El 2018 marcó el fin para diferentes situaciones. Según los analistas consultados por Pharmabiz, llegó el punto final para los precios libres -en función de que el PAMI estableció precios máximos-, la aprobación rápida de productos, a la vez que la inmediata incorporación en los diferentes formularios de reembolso.
Cabe encuadrar que todo este proceso se dio en simultáneo con la «desjerarquización» del Ministerio de Salud que el 5 de septiembre pasó a colgar del Ministerio de Desarrollo Social y bajó un escalón al categorizarse como Secretaría. En paralelo, el PAMI firmó en el mes de noviembre un acuerdo con la ANMAT a fin de intercambiar información acerca de la habilitación de empresas, los registros de productos y de otros temas comunes. Así en el futuro podrían evitarse situaciones como la que posibilitó que Roux y HLB firmaran el convenio PAMI presentando un status del todo irregular ante la ANMAT. Ver artículo. Ver artículo.
La ANMAT, sin embargo, no se vio exenta de múltiples problemas y desajustes. Por un lado el organismo sentó a un nuevo segundo de Carlos Chiale. El elegido fue el médico Waldo Belloso, hombre del riñón del titular de la cartera de Salud, Adolfo Rubinstein. Belloso llegó para tomar el lugar de Roberto Lede, quien dejó atrás la función que asumiera en 2015 junto a Chiale. Aunque previo a ello la ANMAT había quedado bajo los flashes luego de ser allanada a raíz de una causa judicial que implicó al laboratorio argentino Gobbi Novag, y por la que dos funcionarias del organismo fueron procesadas. Las mismas fueron Silvia Barredo y Vanina Lucifora, ambas provenientes del INAME. Ver artículo. Ver artículo. Ver artículo.
Más allá de esto posiblemente el gran dato sea que después de un año hay dos sillones claves que todavía no tienen nombramiento oficial. Por un lado, Jaime Lazovski, que asumió como titular del INAME en reemplazo de Marta Spinetto, aunque sin papeles que lo sustenten al cierre de este artículo; y por otro lado la dirección de Legales que no fue cubierta tras la salida de la histórica Nora Donato. Ver artículo.
En el año que está cerrando también dieron la nota los acuerdos paritarios que se habían firmado con una expectativa de inflación del 15% y que luego tuvieron un refresh en septiembre, tras la mega devaluación de la moneda local. Sin embargo, aún actualizados, los convenios quedaron totalmente desfasados y muestran una diferencia de 9 puntos frente a la inflación acumulada hasta noviembre.
Inflación, paritarias y más
El acuerdo PAMI no fue el único que quedó en el centro de la escena en este 2018. También dieron la nota los moderados convenios paritarios que se habían firmado a principios de año y que incluso luego de tener un refresh en septiembre, quedaron totalmente desfasados. Ver artículo.
El termómetro oficial marcó una inflación acumulada del 44% hasta noviembre, versus una paritaria que, aún actualizada, apenas tocó el 35%. Así la diferencia entre el IPC para los primeros 11 meses del año y los acuerdos salariales del sector, muestra un desfasaje de 9 puntos. Y aunque las partes ya tienen pautado mediante convenio reunirse a fin de año con los números del INDEC 2018 cerrados sobre la mesa, el gap no se amortiguará hasta el 2019. Ver artículo.
En este escenario se destaca nuevamente el caso de los APMs, el gremio que ya lleva tres períodos consecutivos sin firmar la pertinente paritaria con las cámaras industriales de farma. El sector dio la nota este año cuando los sindicatos que nuclean a los APMs de Mendoza, Entre Ríos, Santa Fe y Rosario, se escindieron de la FAAPROME y conformaron su propia Federación: la FASIAPM. Allí aglutinaron también al gremio de Córdoba, el único que había conseguido firmar su propio documento en el 2017. Ver artículo.
Y para rematar este complejo panorama salarial, según pudo saber Pharmabiz, casi ninguna empresa del sector abonó el bono de fin de año de $5.000 que quedó establecido mediante decreto en noviembre. Esto es en función de que el mismo quedó supeditado a que dicho monto podía quedar absorbido por los incrementos adicionales acordados en el proceso de actualización paritaria. Ver artículo.
Un capítulo aparte mereció el frenético recambio de CEOs. Pharmabiz realizó un informe por separado acerca de los enroques y nombramientos agendados durante el 2018, que reflejó más de 20 gerencias con nuevos titulares. Ver artículo.
A su vez son varias las empresas que efectivizaron con recortes y reestructuraciones. A la cabeza se ubicó Elea-Phoenix que además de cambiar a su CEO está avanzando en un achique integrador. También resaltó Craveri que aplicó un proceso preventivo de crisis.
Mientras que a nivel del retail, el gran tema del año fue Farmacity que llegó a la Corte Suprema para ir por más en su decisión de llegar al territorio bonaerense donde permanecen firmes las barreras de ingreso.