La alemana Boehringer Ingelheim cortó cintas en su oficina de Montevideo, Uruguay. La reunión estuvo encabezada por el argentino Eduardo Sorlino y fue para la re-inauguración de su central en ese país. La misma está en el complejo World Trade Center y nuclea al negocio de Salud Humana y al de Salud Animal.
Las operaciones regionales de las multis de farma se muestran muy dinámicas. Y esta vez la noticia llegó desde Uruguay, donde la alemana Boehringer Ingelheim cortó las cintas de sus renovadas oficinas.
Las mismas están ubicadas en Montevideo, en el complejo World Trade Center. Allí la compañía tiene localizados a sus equipos de Salud Humana y de Salud Animal. La reunión se celebró la semana pasada y estuvo encabezada por el argentino Eduardo Sorlino, quien oficia como gerente general para Argentina, Paraguay, Uruguay y Bolivia.
En esta etapa la sede dejó atrás las oficinas o espacios personales. Ahora se abrieron espacios abiertos, salas de creatividad, y espacios tipo Café. Se trata en definitiva, del nuevo layout global que la compañía adoptará en todos los países y que se adapta a las nuevas formas de trabajo más colaborativas. Uruguay es la segunda sede de la corporación en Sudamérica en ser agggiornada bajo este nuevo concepto. La primera fue Ecuador.
El dato de color es que el corte de cintas estuvo bajo la responsabilidad de la colaboradora más nueva, Carolina Ciurkinas. Su coequiper fue Marcelo Pallas, el colaborador con mayor antigüedad en la empresa.