Con un escenario económico más previsible, el país comienza a atraer nuevas inversiones. En paralelo, empresas como Refinor y Aerolíneas Argentinas ajustan su estructura para adaptarse al nuevo tablero. Así, el mapa empresarial se reconfigura entre llegadas, retiros y ajustes.
Varias marcas internacionales anunciaron su llegada o retorno a la Argentina en los últimos dos años, impulsadas por un contexto económico más favorable. En tanto, este proceso se dio gracias a la apertura comercial, la flexibilización de restricciones cambiarias y una mayor estabilidad macroeconómica. Tal como detalla Infobae, hay algunas que ya se instalaron y otras que para este y el próximo año planean desembarcar o ampliar su presencia en el país. Entre ellas se destacan Decathlon, Victoria’s Secret y Dr. Martens. Ver Infobae
Por su parte, la nacional Refinor, encargada desde comienzos de los 90 de abastecer de combustible a siete provincias del norte argentino, anunció que dejará de refinar petróleo en su Complejo Campo Durán, situado en la provincia de Salta. Esta decisión forma parte de una estrategia para adaptar su negocio a las nuevas condiciones del mercado energético. Según Ignacio Ortiz en IProfesional, la medida es el resultado de una larga crisis que se atribuye en particular a la alta capacidad ociosa que el complejo industrial venía arrastrando por la escasez de petróleo y gas para procesar. Ver IProfesional
En paralelo, y como parte de su estrategia de reducción de costos, Aerolíneas Argentinas cerró en abril siete oficinas comerciales en el interior del país. Esto fue en pos de ahorrar en alquileres o generar ingresos, mientras enfoca sus esfuerzos en la venta online de pasajes. Como explica María Julieta Rumi en La Nación y de acuerdo a información de la compañía, al 31 de diciembre pasado contaban con 21 sucursales, de las cuales 17 estarán cerradas al 30 de este mes. Ver La Nación