La industria farmacéutica y el PAMI le dieron un nuevo «changüí» al convenio PAMI. Lo renovaron por un mes. En enero las partes se volverán a ver las caras para seguir discutiendo y volver a punto cero.
El convenio PAMI sigue en el medio de las controversias entre el gobierno y la industria farmacéutica. Sin embargo, se volvió a renovar en los mismos términos durante un mes. Exactamente y según pudo saber Pharmabiz, hasta el 31 de enero de 2017.
Será en el primer mes del año, cuando las partes se vuelvan a sentar para que cada wing siga tirando de su cuerda y el gobierno no quiera moverse de su posición.
Se sabe, que el problema central radica en que el titular del organismo, Carlos Regazzoni, se paró sobre un número fijo del que dice no puede correrse. Afirma que el organismo no tiene más de $2.500 millones para desembolsar por mes.
Las partes ven a la resolución 337 como un lastre, en función de que se contabiliza un consumo por fuera de las normas. Es la normativa que fue creada durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y que brinda la cobertura del 100%. El problema es que sobran las recetas para terceros, a través de los propios usuarios del sistema.
Entonces si el gobierno está parado en ese número. ¿Cuáles son las alternativas para que un nuevo convenio llegue a buen puerto? Hasta ahora, lo más firme que se puso sobre la mesa, es la reducción en el consumo a través de la resolución 337. Es decir, aquella norma emitida durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner que brinda una cobertura del 100%.
Ambas partes toman a ese instrumento como un lastre, en función de que se contabiliza un gran consumo por fuera de las normas. Es decir, sobran las recetas para terceros, a través de los propios usuarios del sistema. La idea es que los auditores del PAMI limiten y controlen más de cerca el volumen de recetas. Pero claro, esto no traerá la solución de un día para el otro. De modo que el verano los volverá a encontrar en ascuas.
En paralelo, el organismo destinó $1600 millones para pagarle a los minoristas, quienes habían cortado los servicios en algunos puntos de venta. Esto claro, no resuelve la situación. Simplemente vuelve a repetirse el viejo truco de las farmacias que hacen presión pública, se abre el grifo para el pago de un monto parcial, y todo vuelve a punto muerto.
Las tres cámaras industriales que están participando del convenio para intentar meter una cuña son CAeME, CILFA y COOPERALA. Los que pusieron la firma en esta «prórroga» fueron Alfredo Ahuad, en representación de la CAEMe; Eduardo Franciosi en nombre de CLFA y Juan Carlos López, como voz de COOPERALA.
