El Gobierno de Javier Milei dispuso la intervención de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis medicinal –ARICCAME– por el plazo de un año debido a su inadecuada operatividad. El médico Ignacio Ferrari asume las funciones de director del organismo descentralizado en lugar de Ruben Giménez.
Las quejas recurrentes de la incipiente industria local del cáñamo y el cannabis se hicieron sentir. La administración del presidente Milei decidió tomar cartas en el asunto e intervenir la ARICAMME, la agencia que regula la importación, exportación, cultivo, producción industrial, fabricación, comercialización y adquisición del cannabis y de sus productos derivados con fines medicinales o industriales.
A través del Decreto 833 que lleva la firma de Javier Milei, el Gobierno dispuso la intervención de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis medicinal, organismo descentralizado, por el plazo de un año. Según detalla la norma, este período podrá ser prorrogado por idéntico plazo y por única vez mediante resolución fundada del titular de la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía. Ver Boletín Oficial
El decreto significa el fin de la gestión de Rubén Giménez en el cargo de director de la ARICCAME. En su lugar, designa interventor al médico Ignacio Ferrari, con rango y jerarquía de director nacional.
Entre los considerandos de la medida, el Gobierno destacó que la «realidad actual evidencia una falta de personal, una inadecuada operatividad, falta de emisión de licencias y autorizaciones habilitantes, así como una significativa demanda por parte del sector privado para la implementación de la ARICCAME, lo que hace imprescindible la reducción de la carga burocrática existente», señaló.
Por otro lado, remarcó que «los antecedentes expuestos informan que es necesario proceder a una reorganización profunda de la ARICCAME y efectuar un rediseño organizativo que resulte más conveniente para que los objetivos tenidos en vista al momento de su constitución sean alcanzados con la mayor eficacia, eficiencia y economía posible», detalló.
Según el decreto, el interventor podrá modificar la estructura orgánica y funcional, los organigramas correspondientes y los Regímenes Profesionales del Personal contratado y funcionarios de gabinete y/o aprobar una nueva; otorgar, controlar y efectuar el seguimiento de las licencias y/o autorizaciones, entre otras funciones.
Hasta tanto la agencia regulatoria cuente con plena operatividad, el Ministerio de Economía prestará los servicios relativos a la ejecución presupuestaria, contable, financiera, de compras, de recursos humanos y en materia jurídica.
