Giovanna Di Firenze está siguiendo el camino de los grandes joyeros europeos. Es que tanto Bulgari como Boucheron y Cartier iniciaron su recorrido por el mundo del lujo de la mano de las joyas, y más tarde se extendieron hacia la moda y las fragancias. Por eso la marca local Giovanna Di Firenze puso en el mercado una línea de belleza.
En este momento quieren apuntar directo al blanco: robarle público a las prestigiosas Lancôme o Helena Rubinstein que se importan desde Francia y sus precios quedaron reservados para las consumidoras de altos ingresos.
La nueva línea de cosmética se encuentra en 50 perfumerías, tales como la cadena Rouge o Ruiz y Roca, aunque en el mediano plazo esperan tener presencia en 150 puntos de venta alcanzando todo el país. En total, la empresa preparó una cartera de 12 productos realizados por terceros que, según Marcela Szalkowicz, vicepresidenta de Giovanna Di Firenze, no se venderán en ninguna de sus 8 joyerías.
La apuesta de los Szalkowicz es de largo plazo. En principio, apuntarán a seguir extendiendo su línea de belleza introduciendo fragancias y más tarde también esperan lanzar una nueva unidad de negocios con eje en la marroquinería.
También apuntan a exportar y ya están en avanzadas negociaciones con los mercados de la región, especialmente Chile y Uruguay, también los Estados Unidos y Europa. La mirada en los mercados externos estuvo puesta desde el principio. Por eso se ocuparon de que todos los nuevos productos se encuentren libres de petrolatos, una instancia decisiva para que la exigente Food and Drug Administration otorgue el OK para ingresar a los Estados Unidos.
Bajo un paraguas cotizado
Aunque a estas horas no pueden estimar cuánto les reportará su nueva área de negocios esperan vender 100 mil unidades al final de este año. En promedio, esta gama de productos se sitúa en un rango de precios de $50 por unidad.
Con esta iniciativa, la empresa también apunta a fidelizar a sus clientes. Su propios consumidores que compran marcas tales como Rolex, Corum, Tag Heuer y Cartier se presentan como buenos candidatos para consumir la nueva línea de cremas, emulsiones y geles que se venden bajo el paraguas de Giovanna Di Firenze.
Al público masivo llegarán con una campaña de marketing que hará eje en las perlas, como unidad conceptual. La idea es ligar el negocio de la cosmética y la joyería como parte de una misma esencia.
Por Cristina Kroll