El laboratorio europeo considera que la Argentina es una de las naciones en desarrollo en la que habitan 76% de los diabéticos de todo el mundo. Concentra 44% de un mercado que factura $78 millones anuales
El laboratorio Novo Nordisk comenzará a importar insulina a la Argentina desde Brasil en el marco de un proyecto que contempla la apertura de una planta productora en el país vecino y que demandará una inversión cercana u$s200 millones.
Actualmente tiene siete plantas en todo el mundo e importa su insulina desde Dinamarca, donde el año pasado desembolsó u$s400 millones para construir un nuevo establecimiento. Desde allí abastece a un tercio de la demanda mundial de insulinas. Y la nueva planta de Brasil tiene que ver con un fuerte crecimiento de las personas con diabetes, que pasarán de 135 millones a 370 millones en el 2030 en todo el mundo.
En ese contexto, la Argentina ocupa un lugar relevante considerando no sólo que los dinamarqueses son los primeros proveedores de insulina, sino que además el país forma parte del bloque de naciones en desarrollo donde viven 76% de los diabéticos del planeta.
Federico Grayeb, gerente general de Novo Nordisk en la Argentina, consideró que la importación de insulina de Brasil «implicará una respuesta más veloz a la demanda en el país a precios muy competitivos«. Pero también interviene un factor muy de costos, ya que los productos del Mercosur no pagan arancel.
Los clientes potenciales de Novo Nordisk son cerca de diez millones de brasileños que sufren de diabetes y otros 2,5 millones de argentinos que padecen la misma enfermedad.
Según la empresa, 20% de los diabéticos necesita aplicarse insulina en forma frecuente. En los países industrializados, 13% de quienes la necesitan reciben tratamiento, pero apenas 3% lo obtiene en las naciones pobres. Por eso la empresa tiene puesta su mirada sobre los países en desarrollo.
Liderazgo local
Grayeb aseguró que la compañía destinará u$s60 millones para mejorar la atención de la enfermedad en países pobres, incluyendo una oferta de reducción de 80% del costo de la insulina sintética respecto de los precios en los Estados Unidos, Europa y Japón.
En la actualidad, y según resultados anuales hasta noviembre de 2003, Novo Nordisk concentra 44% del mercado de insulinas de la Argentina que factura $78 millones anuales. Es seguida por la local Beta, con 28,7%; Eli Lilly, 16,3%, y Aventis, 11 por ciento.
En el caso de Aventis, importa el producto desde Alemania, mientras que Eli Lilly lo hace desde los Estados Unidos y Francia. Este cuadro hace que los especialistas estimen probable que Beta, segunda en el mercado de insulinas argentino, será la que perdería mayor cuota de mercado.
Previendo un crecimiento acelerado de la enfermedad, el laboratorio danés comenzó a importar algunos de sus productos elaborados por su filial de Brasil. Sucede que durante el año pasado finalizaron la compra del laboratorio Biobras, de manera que va están sumando cierto expertise en la logística de productos para la región.
Por Cristina Kroll