Sería el único competidor de Biogénesis en un mercado que mueve alrededor de u$s30 M anuales
El laboratorio local Paul está invirtiendo u$s3,5 millones en su planta de Mataderos para producir vacunas, productos biológicos y medicinas para pequeños y grandes animales. Aunque el producto que está concentrando la atención de la compañía es la vacuna para la aftosa, la cual se encuentra en trámite de aprobación.
Si el laboratorio obtiene el visto bueno para manufacturar esta vacuna, entraría a competir en un mercado cautivo, ya que este tipo de vacunación es obligatorio para el total de las cabezas de ganado. De esta manera, se plantarían como el único competidor de Biogénesis en un mercado que mueve 50 millones de dosis por semestre, que cotiza cerca de u$s15 millones.
Antes también competía Rosenbusch, sin embargo dejó de producir esta vacuna cuando el país erradicó la enfermedad en el 2002 y se declaró libre de aftosa sin vacunación. La inversión de la firma se da en el momento en que el Senasa restringió la entrada al país de productos de origen animal procedentes de los Estados Unidos y de la Unión Europea, por el «mal de la vaca loca». Por ese motivo, los especialistas afirman que se presentan algunas oportunidades ya que uno de los insumos que se utiliza para manufacturar vacunas para perros proviene de la vaca.
De esta manera, los laboratorios nacionales deberán abastecer toda la demanda de vacunas para perros, un mercado que alcanza un tamaño de 1.8 millón de dosis. El principal competidor en este terreno es Rosenbusch, que elabora vacunas para rabia de perros y bovinos y su producción total durante el 2003 fue de 1,2 millón de dosis.
En Paul señalan que la compañía ha realizado junto con FABA, el Instituto de Zoonosis Luis Pasteur y el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, una campaña gratuita para asistir a 94 refugios de perros abandonados, donde se vacunó y desparasitó a más de 6.000 caninos y que ha sido declarada bajo resolución 11.112/1804 de interés provincial por el Ministerio de Salud.
Por Cristina Kroll
