La escasez de tampones que afecta a Estados Unidos desde hace varias semanas sumó otro ribete. Ahora la multi P&G, dueña de Tampax, dice que no puede conseguir suficientes empleados para su planta en Maine, aún pagando u$s 25 la hora.

En el arranque de la pandemia, los consumidores se abalanzaban sobre las góndolas de rollos de papel higiénicos, a fin de hacerse de stocks para llevar adelante la reclusión hogareña. Y ahora, cuando la pandemia parece superada, los que sintieron el impacto, fueron los tampones femeninos, que registran una sobre demanda, debido a la alarma por su falta en el mercado.

En este segmento la que resalta es la dueña de Tampax, la marca número uno del mercado estadounidense, que encuentra dificultades para sumar operarios y así aumentar su capacidad de producción. En su intento de atraer trabajadores a su planta de tampones en Maine, una de las más importantes del país, P&G ha estado aumentando los salarios durante meses.

Según un artículo de Bloomberg, en febrero de 2021, la empresa anunció un sueldo inicial por hora de u$s 17,91, valor que en julio subió hasta u$s 23,41. Y en enero último elevó la remuneración a u$s 25,41, superando el promedio nacional para los trabajadores de manufactura en casi 50 centavos. Así, el salario anual promedio anunciado pasó de u$s 47.000 a u$s57.000 y luego a u$s 60.800. El paquete de beneficios incluye 15 días de vacaciones y 12 días festivos pagados, seguro médico y un gimnasio gratuito. “Todavía no es suficiente”, dice la nota que lleva la firma de Daniela Sirtori-Cortina. Ver Bloomberg.

Los problemas de personal han coincidido con un aumento en la demanda de tampones. Aunque no han llevado a una escasez total, estos se agravaron cuando algunas mujeres en todo el país comenzaron a abastecerse a medida que se difundían informes de inventarios más bajos. Las cadenas de suministro también se han visto afectadas por los costos de las materias primas.

Claro que la dificultad para encontrar empleados no es propiedad exclusiva de P&G. Es algo que en EEUU se observa en casi todos los sectores económicos, desde la gastronomía a la industria petrolera, dice el artículo. En la actualidad, existen casi dos puestos vacantes por cada trabajador desempleado. El aumento de la competencia ha elevado los salarios y a ello se han sumado las presiones inflacionarias, lo que llevó al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, a calificar recientemente al mercado laboral de «insosteniblemente caliente».

Aunque la falta de tampones no es lo único que se observa en relación a la industria de Healthcare en Estados Unidos. Por caso, en la actualidad un escenario similar, aunque por razones de naturaleza distintas, se vive en el segmento de fórmulas infantiles. Ver Fórmulas: otra vez bajo la picota.

Tampax es la marca de tampones número 1 de Estados Unidos, con el control de casi un tercio del mercado en 2021, según Euromonitor International. La planta en Maine es la única donde P&G fabrica los productos en América del Norte. Obtuvo el control de la misma después de la adquisición de Tambrands, a fines de la década de 1990.

En la Argentina, la líder de la categoría es la norteamericana J&J, con su marca O.B. También compiten la norteamericana Kimberly-Clark, que comercializa Kotex; y el grupo sueco EssityGrupo Familia-, con la etiqueta Nosotras.

Fórmulas: otra vez bajo la picota

Artículo anteriorCorreo Argentino gana contratación $1.386M
Artículo siguienteSensident: otra con restyling
Christian Atance
Periodista especializado en finanzas y mercado de capitales.

DEJA UNA RESPUESTA

Escriba su comentario
Ingrese su nombre