La incorporación de la compañía británica de maquillaje y cuidado de piel Charlotte Tilbury en sus estados contables y la recuperación de ciertos mercados, le permitieron a la multi española de cosmética Puig cerrar 2021 con un fuerte crecimiento en facturación del 68% a € 2.585 millones. Para 2022, proyecta alcanzar ingresos por más de € 3.000 millones.
La española de moda y fragancias Puig logró dejar atrás definitivamente los efectos de la pandemia. Durante su año fiscal 2021 reportó ventas netas de € 2.585 millones, lo que representó un incremento del 68% respecto a 2020 y un 27% en relación a 2019. Ver Press Release.
La incorporación de la división Derma y de Charlotte Tilbury ayudó a esta mejora. Asimismo, la recuperación de los mercados en EMEA y el crecimiento de EE.UU y Asia también fueron otros de los grandes disparadores de este desempeño, explicó la compañía
En la categoría Fragancias, Puig registró un incremento de las ventas del 41% respecto a 2020 a € 1.898 millones. Esta performance se vio impulsada por la recuperación en ciertos mercados como EMEA, en la que destacaron los lanzamientos de Phantom de Paco Rabanne y Scandal pour Homme de Jean Paul Gaultier.
En el segmento de Maquillaje, la española incrementó sus ventas un 153% interanual a € 413 millones. Charlotte Tilbury, con su línea de luxury make-up y su foco en el negocio digital, sigue siendo el principal motor de crecimiento de esta categoría, junto a Christian Louboutin, gracias a la expansión geográfica y a la apertura de puntos de venta en EE.UU y en China.
En Dermocosmética, sus ventas se dispararon un 954% a € 274 millones. Con las marcas Uriage, Apivita y Charlotte Tilbury, reforzó la presencia en Europa y continuó con la expansión internacional en Asia, donde logró un crecimiento de doble dígito.
En un análisis por regiones, la española informó que sus ingresos en la región que denomina Américas crecieron un 75% a € 839 millones. En tanto, la facturación en EMEA -Europa, Medio Oriente y África-, subió un 60% a € 1.498 millones, mientras que en Asia se disparó un 107% a € 258 millones.
Desde su fundación en 1914, Puig se mantiene como una compañía de estructura familiar. A pesar de que sus acciones no se negocian en ningún mercado del mundo, tiene la costumbre de hacer públicos sus resultados anuales.
En el primer día de 2021, Puig estrenó uno nueva estructura empresarial. A fines del año pasado, anunció que su negocio se dividiría en tres divisiones: Beauty and Fashion, Charlotte Tilbury y Derma. Ver artículo.
Con este nuevo organigrama, la compañía tiene como objetivo superar los € 3.000 millones de ventas en 2023, y alcanzar los € 4.500 millones en 2025. Su plan de crecimiento sostenido se apoya en un fuerte impulso del canal digital y a un aumento de los ingresos en Asia, que supondrán un 30% y un 25% respectivamente en 2025.
«Las palancas de crecimiento hasta 2025 serán la expansión del negocio digital, el crecimiento de la compañía en Asia, especialmente en China, gracias a Charlotte Tilbury y a las marcas Niche; así como un incremento en la diversificación en las categorías de Maquillaje y Dermocosmética, y la progresiva recuperación del canal de travel retail«, explicó la compañía.
Gracias al desempeño en 2021, las previsiones de la catalana para 2022 apuntan a superar los € 3.000 millones de facturación un año antes de lo esperado, dijo la compañía. En la región, Puig tiene a Pablo Mortstedt como responsable de las filiales de Argentina, Chile, Perú y Colombia.
En junio de 2020, en pleno confinamiento, la multi comunicó la adquisición de Charlotte Tilbury, marca británica icónica de maquillaje y cuidado de la piel fundada en 2013 con un fuerte posicionamiento digital. Ver artículo.