La Cámara de Medicina Oftalmológica (CAMEOF) se sumó al grupo de entidades gremiales que solicitó una urgente recomposición de los valores de las prestaciones que pagan las entidades de medicina prepaga. En este sentido, acaba de firmar un acuerdo de cooperación con la Cámara de Instituciones de Diagnostico Médico (CA.DI.ME) a efectos de instrumentar acciones conjuntas.
La falta de actualización de aranceles sigue siendo el foco de mayor preocupación de los distintos prestadores médicos. Esta vez fue la Cámara de Medicina Oftalmológica (CAMEOF) la que advirtió que el incumplimiento de lo establecido por el propio Ministerio de Salud a través de la Resolución 2125/21 pone en riesgo la viabilidad económica del sector. Ver Comunicado.
La entidad acaba de sellar una alianza estratégica con la Cámara de Instituciones de Diagnóstico Médico (CA.DI.ME) para trabajar en forma conjunta en pos de una solución. El acuerdo de cooperación fue firmado durante un encuentro en el que participaron el presidente de CA.DI.ME, Guillermo Gómez Galizia; el vicepresidente, Martín Iturraspe; el secretario, José Laurensio; el director general, Hernán Grecco y el director del Área Técnica, Javier Vilosio. CAMEOF estuvo representada por el presidente Gustavo Bodino y por Isabel Charles.
Las autoridades de ambas entidades manifestaron su preocupación por el «permanente agravamiento de la situación crítica en la que se encuentra el sector salud en general, y en particular los prestadores oftalmológicos«. CAMEOF y CA.DI.ME destacaron que el Gobierno Nacional a través de la Resolución 2125/21, autorizó un incremento en tramos de las cuotas que los afiliados pagan a la medicina prepaga (EMP) cercano al 41,5% en total, con la obligatoriedad de su traslado a los prestadores.
Sin embargo, explican que según un relevamiento nacional efectuado por ambas cámaras, solo un 30% de los prestadores ambulatorios – mayoritariamente PyMES – recibieron los aumentos pactados por parte de las obras sociales nacionales y prepagas. Enfatizaron que en oftalmología el 40% de los costos están expresados en dólares.
Por otro lado, manifestaron que hasta el 2020 los aranceles por los que se retribuye la realización de cada acto médico «venían con un retraso enorme con respecto a la inflación y a la evolución del tipo de cambio y en relación a los mismos aumentos autorizados en los años previos por la Superintendencia de Servicios de Salud a las EMP. La brecha acumulada por esas distorsiones asciende al 153%«.
CA.DI.ME y CAMEOF vienen alertando sobre el «impacto negativo que soportan los prestadores independientes que representan, dados los fuertes aumentos de sus costos operativos mientras sus ingresos dependen de valores arancelarios rígidos, definidos básicamente por las obras sociales y prepagas».
Además, «estos aranceles depreciados se cobran con 60, 90 y hasta 120 días de retraso, con quita de valores facturados sin ningún tipo de justificación operativa ni documental y en algunos casos a través de mecanismos de intermediación como las denominadas gerenciadoras«, agregó el comunicado.
Ambas cámaras solicitaron la urgente instrumentación desde la Superintendencia, de medidas de contralor que permitan la rápida implementación de la actualización de aranceles especificados en la resolución mencionada. Por otro lado, sostienen que es relevante el funcionamiento pleno del Consejo Permanente de Concertación en su rol de paritaria arancelaria, previsto por las Leyes 26.682 y 23.661.
En las últimas semanas, diferentes cámaras empresarias que forman parte de los variados eslabones del sistema de salud como la propia CA.DI.ME, la Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina –CUBRA– y la Cámara Argentina de Laboratorios de Análisis Bioquímicos –CALAB– solicitaron la intervención del Ministerio de Salud y de la SSS. Es para que los financiadores cumplan con la resolución 2125/2021, que obliga a las empresas de medicina prepaga a trasladar el aumento autorizado de las cuotas de los afiliados a las prestaciones que contratan.