A pesar de las flexibilizaciones en todo el país, el aislamiento obligatorio por el coronavirus sigue generando un impacto negativo en la economía. Durante esta semana, los medios de comunicación reflejan la realidad de distintas industrias.
Después de más de 130 días de cuarentena, los sectores económicos empiezan a buscar estrategias para sortear la recesión y la crisis generada por la pandemia.
En el diario La Nación, Diego Cabot expone que escalan los Procesos Preventivos de Crisis (PPC) durante esta cuarentena. Según el periodista, las empresas se están preparando para la economía que viene y buscan hacer sus estructuras más pequeñas. Así, el sector privado se estaría enfrentando a una «descomunal reestructuración«, enfatiza el artículo. Desde el aislamiento, a partir de datos oficiales del Ministerio de Trabajo, ya se sumaron 272 pedidos de PPC. En todo el 2019 -que ya había sido un mal año para la actividad, aclara la nota- se presentaron 120 compañías, y el anterior, 108. Mientras tanto, en el Congreso hay 11 proyectos para modificar la ley de Concursos y Quiebras y el Poder Ejecutivo mandará al Legislativo uno en el que se pergeñan varias soluciones para que los concursos no terminen en quiebras y las empresas mantengan su actividad. Ver artículo La Nación.
En La Nación, Diego Cabot le pone cifras a la recesión que atraviesa la Argentina desde el comienzo de la cuarentena. En ese período, según datos oficiales, 272 empresas presentaron pedidos de Procesos Preventivos de Crisis. En todo el 2019 habían sido 120 y el año anterior, 108.
Fernando Nolé refleja en la edición dominical del diario Perfil las medidas fiscales y financieras que están en gateras para apuntalar la recuperación. El gabinete económico se reunió -consigna el artículo- y evalúa frenar la emisión monetaria, acortar la brecha del dólar y subir la recaudación impositiva. Además, el punto que ya estaría resuelto es el de reducir las retenciones sobre el sector industrial que, en principio, abarcaría un descenso del 5% al 0% para determinados productos y una rebaja de un punto porcentual para la producción de insumos industriales. Del encuentro participaron el jefe de gabinete Santiago Cafiero; la vicejefa del área, Cecilia Todesca; los ministros de Economía, Martín Guzmán, y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; el presidente del Banco Central, Miguel Pesce; y la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont. Ver artículo Perfil.
Andrea Catalano realiza un extenso análisis en Iprofesional acerca de las expectativas de las empresas en el Hot Sale que arranca hoy, lunes 27 de julio. Según el artículo, el evento que dura tres días será «la revancha del consumo«, y le servirá a muchos negocios que estuvieron casi frenados para sacarse stocks de encima. En la edición de mayo del 2019, la acción organizada por la CACE superó los $8.500 millones de facturación y, para Catalano, todo indica que ese umbral será sobrepasado, luego de que el aislamiento acelerara el comercio electrónico. Turismo e Indumentaria son las dos categorías que quieren recuperar lo perdido a través del financiamiento y los fuertes descuentos. Desde Iprofesional recomiendan «leer la letra chica», ya que algunas promociones dependen del stock y solo se aplican en artículos seleccionados. Ver artículo Iprofesional.
En Clarín, por su parte, se da cuenta de la crisis que atraviesa el sector de la gastronomía después de cuatro meses sin abrir. En un artículo firmado por María Sol Porta los jugadores del sector coinciden en que el delivery -el único método que les permitió seguir facturando durante la cuarentena- apenas cubre algunos gastos, y que cuando los autoricen a levantar sus persianas será «como arrancar de cero«. La nota menciona casos de restaurantes que debieron postergar el pago del alquiler, ya que algunas obligaciones -como el pago a proveedores– deben mantenerse según las condiciones previamente estipuladas, a pesar de que las ventas representen un 5% de las de diciembre. Por eso, los gastronómicos ya anticipan un desembolso de hasta $500.000 solo para la primera semana, que incluye la mercadería, limpieza y mantenimiento, poner en marcha los protocolos de higiene y seguridad por el COVID-19 y los gastos de publicidad. En este contexto, las cadenas de la industria solicitan ayuda del gobierno, desde la continuidad de los planes ATP hasta la reducción de la presión fiscal. Ver artículo Clarín.