La farmacéutica EMS, siempre ligada al negocio de los genéricos, ahora parece que busca un reposicionamiento. En una nota de larga extensión en la revista de negocios Istoe Dinheiro, la empresa explica sus planes para crecer 25% en 2020 combinando inversiones en plantas de fabricación y en invesigación para el desarrollo de medicamentos propios.
La revista brasieña Istoe Dinheiro realiza una reciente entrevista a los directivos de farmacéutica EMS. En la nota, Marcus Sanchez, el vicepresidente instuticional repasa los diferentes temas relativos a la compañía.
El artículo que lleva la firma de Sérgio Vieira fue titulado como «Crecimiento nada genérico» y en el mismo se destaca el incremento de ingresos del 21% que EMS registró en el primer semestre de 2020, más del doble del 10,24% promedio que exhibió la industria farmacéutica local. También detalla inversiones en distintas plantas de fabricación y resalta la apuesta del laboratorio por la investigación. Ver artículo Istoe Dinheiro.
Según Sánchez, EMS quiere cerrar 2020 con un crecimiento del 25%. El año pasado, sus ingresos netos fueron de R$ 5.600 millones (uSs 1.043,4 millones) mediante la venta de 556 millones de unidades. Para ampliar su capacidad de producción, la empresa está destinando R$ 1.000 millones (uSs 186,3 millones) en las fábricas de Hortolândia y Jaguariúna (en el interior de San Pablo), Manaos y Brasilia, parte de un plan que comenzó en 2012 y espera completar el año próximo.
Gracias a su apuesta por los genéricos a comienzos de la década pasada, EMS logró convertirse en el líder de la industria farmacéutica brasileña con un market share que actualmente es del 8,21%. Con ventas que en 2019 fueron de u$s 1.043 millones, ahora quiere dar una vuelta de rosca apostando a medio centenar de productos nuevos que hoy tiene en distintas etapas de desarrollo y también a los biosimilares
El artículo de Istoe Dinheiro afirma que el laboratorio ganó músculo a partir de la liberación de medicamentos genéricos en Brasil y que EMS fue la primera en producir esta clase medicamentos en ese país en el año 2000. Así hoy tiene 500 genéricos en su cartera, con una demanda mensual de 20 millones de cajas.
En la entrevista, Sanchez confesó que el nuevo diseño estratégico de EMS busca adoptar menos copias e invertir más en innovacion. Para ello, la compañía destina el 6% de sus ingresos anuales para garantizar la actividad de 400 investigadores en el centro que posee en Hortolândia, en la región metrolpolitana de Campinas (estado de San Pablo). Hoy cuenta con 50 nuevos productos en diferentes etapas de desarrollo. Aunque ahora, la compañía se quiere correr de ese encasillamiento y por caso, logró que la FDA le aprobara un dispositivo para uso de emergencia en el tratamiento de deficiencias cardiopulmonares, su primera innovación radical en suelo estadounidense.
Istoe Dinheiro resalta que dentro de esta estrategia de innovación, EMS también apuesta a los medicamentos biológicos. Con el fin de reducir la distancia que existe hoy entre Brasil y las multinacionales que operan en el segmento, así como para bajar los costos de importación de estos productos, se unió a los competidores Aché, Hypera Pharma y União Química para crear, en 2012, Bionovis. Sánchez dice que Bionovis está en camino de obtener la aprobación para producir un biosimilar en Brasil. Con inversiones del orden de u$s 110 millones en este desarrollo, la perspectiva es que el producto pueda llegar al mercado en 2027. Para prepararse, este joint venture está invirtiendo R$ 420 millones (uSs 78,3 millones) en la construcción de una fábrica en Valinhos (San Pablo), que debería estar lista el año que viene.
Cotización del 21 de julio del 2020: u$s 1 = R$5,36