El segmento de soluciones parenterales está en pleno crecimiento y consolidación en la Argentina. La obligación que impuso la ANMAT de fabricar únicamente a través de tecnología de sistema cerrado le dio puntapié a diferentes inversiones. Ahora, en plena pandemia, una firma nacional se pone operativa.
Aún en este contexto marcado por la cuarentena y la merma en la mayoría industrias, el segmento de las soluciones parenterales avanza en un proceso de sostenida transformación en la Argentina.
Esto fue después de que en el 2017 la agencia regulatoria local emitiera una normativa exigiendo a las compañías migrar sus unidades de producción hacia la tecnología de sistema cerrado. Ver artículo.
Así, una de la que puso primera fue la alemana B. Braun que realizó un desembolso de € 30 millones para levantar una planta de parenterales en Mar del Plata tal como lo consignó Pharmabiz. Ver artículo.
Y durante este mes, la empresa nacional Bina Pharma encendió los motores de su nueva planta de parenterales en el parque industrial de Hudson. La firma, según pudo saber este medio se enfocará en la producción de inyectables en gran volumen con sistema de elaboración y de dosificación cerrados para comercializarlos exclusivamente en el mercado interno. En esta etapa ya arrancó con lotes para terceros y en el corto plazo fabricará para sí.
La empresa propiedad de Darío Casal, Leonardo Lew y Marcelo Urdampilleta se levantó a través de una inversión que rondó los u$s 15 millones. La firma competirá con empresas tales como Laboratorios Jayor; y las nacionales Tecsolpar y Norgreen; y otros.
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