El juez Norberto Oyarbide que lleva adelante la causa iniciada que involucra medicamentos apócrifos y adulterados, dio una conferencia de prensa en el día de hoy.
Dicha investigación tuvo su origen en una inspección de rutina efectuada por inspectores de la Dirección Nacional de Registro, Fiscalización y Sanidad de Fronteras del Ministerio de Salud de la Nación.
El juez destacó que «la peligrosidad de las sustancias medicinales descubiertas se vio confirmada con el informe elevado al Tribunal por la Administración Nacional de Medicamentos».
Describió que en el laboratorio clandestino que funcionaba en el domicilio del abogado García Cocca se fabricaban medicinas en base a crotoxina.
Y subrayó que según el organismo regulatorio local, no hay referencias científicas que avalen su eficacia contra tumores a través de la realización de ensayos clínicos controlados en humanos.
Dichos medicamentos se comercializaban en la ex farmacia Nueva Kumi, que al momento funcionaba bajo la fachada de un kiosco, debido a que había sido clausurada por el Ministerio de Salud, por no contar con director técnico.
A dicho farmaKiosco concurrían los clientes, “en su mayoría familiares de pacientes oncológicos, con la esperanza de que dichos medicamentos pusieran fin a esa dolorosa enfermedad».
El juez definió al caso ante los periodistas que estábamos presentes como “extremadamente grave”, por lo que hizo hincapié en que aquellos pacientes que se sintieran afectados se acerquen a dicho juzgado a fin de ser examinados por el cuerpo médico forense.
Afirmó también que ninguno de los siete detenidos solicitó la excarcelación. Y que en dos semanas se avanzaría en la definición de la situación procesal de los mismos.
Nota: la fotografía que ilustra este artículo fue tomada durante la conferencia de prensa dada hoy en Buenos Aires. Muestra parte de lo incautado en los tres allanamientos.
Quienes quieran consultar el comunicado de prensa entregado a los periodistas en la conferencia de prensa del viernes, pueden descargarlo AQUÍ.
