El laboratorio Phoenix volvió oficialmente a ser una empresa nacional. Desde el 1º de diciembre la firma ya está operando bajo el ala de Elea, y con nuevos accionistas argentinos.
El día uno de la nueva etapa del laboratorio Phoenix ya empezó a correr desde este diciembre de 2017.
Según pudo saber Pharmabiz, el viernes pasado se llevó a cabo una reunión en la propia sede de Villa de Mayo. En la misma estuvieron presentes los flamantes accionistas argentinos y en ese acto se cortaron simbólicamente las cintas de la nueva gestión.
Con Carlos Mayotti a la cabeza, la firma deberá revertir el descenso que se reflejó en los siete años en que el laboratorio estuvo bajo la estructura del británico GSK.
El organigrama de la compañía se mantiene intacto por ahora, según pudo saber Pharmabiz. Al frente sigue Carlos Mayotti que desde el año que viene entra en zona de jubilación. Mientras que los 500 empleados seguirán formando parte de la dotación, mitad en planta y mitad en el área comercial.
Por lo pronto, una palanca ya fue movida. Este medio pudo constatar que desde el mismo 1º de diciembre Phoenix comenzó a comercializar los productos a través de Disprofarma, la distribuidora de la cual sus nuevos dueños son accionistas, y así se separó de Globalfarm, donde opera GSK.
Aunque respecto del organigrama conformado por 500 empleados, la decisión es que por ahora no se toca. Al frente seguirá Mayotti, que en el 2018 entra en zona de jubilación. Y también el director de Promoción, Pedro Fiori, que ronda los 65. Ver artículo.
En el área de producción, el que tendrá la batuta será Hugo Bruschi, reportándole directamente a Carlos Soros, el uno de manufactura en el grupo Elea. Así, el site que también comenzará a producir para terceros y para la propia Elea permanecerá con la misma dotación conformada por 250 miembros.
Es justamente la planta de Phoenix el principal atractivo que vieron Daniel Sielecki; Hugo Sigman; y Luis Gold a la hora de ir por la recompra. El interés de los nacionales estuvo basado principalmente en la necesidad de obtener una nueva planta industrial, para descomprimir la fábrica de Elea situada sobre la calle Sanabria, que en la actualidad está colapsada. Ver artículo.